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Santander – 21.06.2021
La consejera de Empleo y Políticas Sociales, Ana Belén Álvarez, ha inaugurado esta mañana el curso ‘Migración Laboral y Esclavitud Moderna’, que cuenta con la colaboración del Servicio Cántabro de Empleo (EMCAN), con el que ha comenzado la programación de verano de la Universidad de Cantabria en Santander y donde ha señalado que “en una economía globalizada los problemas y sus soluciones no pueden ser aislados” en referencia a los retos migratorios que afronta Europa, y especialmente España como frontera sur.
La consejera ha indicado que, como Autoridad Laboral, desde la Consejería de Empleo y Políticas Sociales “nos preocupa” cómo afecta en el plano social y laboral a las personas emigrantes, inmigrantes o en tránsito, esta nueva situación; con especial atención a las personas migrantes jóvenes, algunas de ellas no acompañadas, que carecen de redes familiares de apoyo y sufren desprotección.
Con relación a los jóvenes, ha recordado que la reforma laboral aprobada en 2012 planteó numerosos problemas de aplicación práctica; y que las nuevas prioridades definidas a nivel europeo un año después con el nacimiento de la Garantía Juvenil, supuso la creación de un nuevo sistema de atención a la población joven, desde el punto de vista laboral.
Se ha referido también al avance de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación, con la industria 4.0, el Internet de las cosas, la robotización o el fenómeno de las empresas multiservicios, procesos todos ellos que se han acelerado durante la pandemia.
Sobre la globalización y la “competencia extrema” que ha desencadenado una subcontratación masiva entre empresas y países por todo el mundo, y ha provocado un efecto dominó en la calidad del trabajo, la consejera ha expresado su confianza en que estemos ante el inicio de un cambio en la asunción de responsabilidades, con la aprobación en el Parlamento alemán el pasado 11 de junio, de la denominada Ley de Cadena de Suministros, que obligará a las empresas a actuar contra aquellos suministradores que atenten contra los derechos humanos de sus trabajadores o el medioambiente. Con multas de hasta el 2% de su facturación anual si no vigilan el cumplimiento de estos derechos por parte de sus proveedores.
Del curso ‘Migración Laboral y Esclavitud Moderna’ ha indicado que con esta nueva edición se consolida la participación de la Consejería en la programación de los cursos de verano y extensión universitaria de la Universidad de Cantabria, colaboración que se complementa con el curso ‘Herramientas prácticas para la empleabilidad: técnicas orientadas al desarrollo de competencias profesionales en entornos digitales’, que se desarrollará en Torrelavega entre el 30 de agosto y el 3 de septiembre.
Ambos son expresión del afán con el que desde el Gobierno de Cantabria “deseamos colaborar con la comunidad universitaria en proyectar al conjunto de la sociedad a través de actividades formativas conocimiento, pero también debate y reflexión crítica sobre temas de candente actualidad”.
Migración laboral y esclavitud moderna
El curso sobre Migración Laboral y Esclavitud Moderna está dirigido por el profesor David Lantarón Barquín, catedrático de Universidad de Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social. Coordinador del Grupo de Investigación de Derecho del Trabajo y Protección Social de la Universidad de Cantabria, con la colaboración del Servicio Cántabro de Empleo.
Se imparte desde hoy día 21 hasta el 25 de junio. Se trata de un curso monográfico en el que un elenco de 8 profesores expertos en derecho del trabajo tratará de ahondar en el régimen jurídico y la situación actual de este fenómeno.
Los destinatarios son personas que, desde cualquier perspectiva de las Ciencias Jurídicas y Sociales –o más allá de éstas- estudien la materia (estudiantes y graduados en Derecho, RR.LL., Ciencias Políticas, etc..). También los integrantes de instituciones públicas y privadas, así como los agentes sociales, organizaciones sindicales y empresariales, interesados y afectados en o por la materia.
El objetivo de este curso es ahondar en el régimen jurídico y situación actual del fenómeno de la migración y de sus problemas y efectos. Una realidad que impacta también en nuestra región, como la propia necesidad de vigilancia portuaria ha acreditado en las últimas fechas.
Las migraciones de personas, y en especial de trabajadores y sus familias, que constituyen el porcentaje claramente mayoritario de aquellas, son uno de los fenómenos más importantes de nuestra era. Así se aprecia en la Declaración para la Justicia Social por una Globalización Equitativa de la Organización Internacional del Trabajo y en la propia caracterización jurídica de esta época identificada por la comercialización, la inseguridad jurídica y el fenómeno migratorio (Thrift).
Aproximadamente, más de 250 millones de personas se desplazan según constata el reciente informe del Consejo Económico y Social. Generando, en particular, respecto a los así denominados migrantes irregulares complejas cuestiones jurídicas. Y, más allá de todo ello, grandes problemas humanitarios.
Algunas de estas personas, no en número irrelevante, son objeto de explotación y abuso; e incluso se demanda la tutela en origen del trabajo para evitar situaciones que en no pocas ocasiones constituyen esclavitud.
Por ello, no sólo la OIT a través de innumerables instrumentos, sino también la Unión Europea y sus Estados se ocupan de este fenómeno que ha sido objeto de un intenso tratamiento global.
