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Santander – 08.07.2021
El consejero de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Guillermo Blanco, ha destacado hoy el apoyo que el Gobierno de Cantabria ofrece a los Grupos de Acción Costera por su importancia a la hora de impulsar las actividades del sector pesquero de la Comunidad Autónoma.
Así se ha pronunciado durante la firma de los contratos de varios proyectos que la Consejería financiará, por un importe total de 63.465 euros, a través del Grupo de Acción Costera (GAC) Occidental, para dinamizar la zona oriental de Cantabria a través de las actividades en el ámbito marítimo pesquero.
Los contratos, firmados en la sede de la Asociación de Desarrollo Rural Saja-Nansa, corresponden a un proyecto de la Cofradía de Pescadores de Comillas para instalar un equipo frigorífico y cuatro traspaletas manuales en el Puerto de Comillas.
Su objetivo es la modernización de las actuales instalaciones de la Cofradía con el fin de adaptarla a las necesidades actuales que requiere la actividad diaria de la entidad y mejorar los servicios para el conjunto de sus miembros.
También se ha firmado el contrato relativo a la creación de una página web y una tienda online por parte de la empresa Maribel Santiañez y Marsan Pescaderías, uno de los compradores más antiguos de la lonja de San Vicente de la Barquera que pretende, con esta modernización en su negocio, ampliar su actividad de venta de pescado en fresco, proceso de ahumado y cocción de angula entre el consumidor final, la hostelería y los mayoristas de pescado.
Además, se han financiado dos proyectos relacionados con la recogida de algas de arribazón en las playas de la costa occidental, su posterior secado, almacenamiento y venta. En concreto, se trata de las empresas Noriega Servicios Medioambientales y Tomalser, ambas de San Vicente de la Barquera.
En ambos casos, los proyectos financiados permitirán la construcción de sendas naves para el almacenamiento de algas de arribazón, una vez secas y hasta su expedición, teniendo en cuenta que este producto cuenta con una alta demanda en el mercado por sus amplias aplicaciones en la alimentación, la microbiología molecular y la cosmética.
Finalmente, la Asociación de Desarrollo Rural Saja-Nansa ha recibido fondos de la Consejería, a través del GAC Occidental, para poner en marcha un proyecto de diversificación de la actividad profesional del oficio de redera en San Vicente de la Barquera mediante la formación de estudiantes de Secundaria acerca del valor del medio marino y la cultura oceánica como aspectos clave en el desarrollo sostenible de los municipios en los que viven.
Además, se pretende potenciar el emprendimiento y la formación específica en los diferentes sectores de actividad, trabajando con el colectivo de rederas.
Fomentar el emprendimiento
Tras la firma de los contratos, el consejero ha agradecido a todos los emprendedores por invertir en los municipios costeros y contribuir a dinamizar el desarrollo local participativo y su capacidad para generar riqueza, empleo y actividad económica.
Ha puesto en valor la estrategia local participativa del GAC Occidental y su trabajo como entidad colaboradora en la gestión de los fondos europeos de la pesca para facilitar la puesta en marcha de proyectos y actividades en la zona occidental que ayudan a revitalizar las villas marineras.
“Estas políticas que desarrollan estos grupos son vitales porque contribuyen de manera decidida a impulsar que las personas inviertan en los recursos naturales de las zonas pesquera de Cantabria, su paisaje y su patrimonio cultural”, ha señalado Blanco.
A la vista de los resultados cosechados hasta el momento y el éxito de participación y gestión “eficaz y eficiente” de los fondos, Blanco ha reafirmado el compromiso de su departamento de seguir apoyando iniciativas emprendedoras a través de esta estrategia para el nuevo periodo de programación del Fondo Europeo Marítimo, de la Pesca y la Acuicultura (FEMPA).
En su opinión, “tenemos que seguir apoyando estas políticas para poder ayudar al sector pesquero a enfrentarse en las mejores condiciones posibles a los retos de futuro, tales como la reducción de la pesca y de las actividades relacionadas, el aumento del desempleo y el envejecimiento de la población”.
En la firma de los contratos también han estado presentes, entre otros, el alcalde de San Vicente de la Barquera y presidente del GAC Occidental, Dionisio Luguera; la directora general de Pesca y Alimentación, Marta López, y el presidente de la Asociación de Desarrollo Rural Saja-Nansa, Secundino Caso.
Grupos de Acción Costera Occidental
Creado en 1992, el Grupo de Acción Costera Occidental es una entidad sin ánimo de lucro y de carácter supramunicipal que busca la cooperación y el compromiso para realizar acciones relacionadas con el mundo pesquero con las que se pretende fomentar el desarrollo del territorio, el fortalecimiento del sector pesquero, la innovación y la diversificación para los profesionales del mar.
Para llevar a cabo su actividad cuenta con la financiación de la Consejería de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, a través del Fondo Europeo Marítimo y de Pesca (FEMP).
Todos los proyectos que impulsa están encaminados al desarrollo de los puertos pesqueros mediante iniciativas que tratan de ajustar el esfuerzo del sector con la protección del entorno marino, además de potenciar actividades como la acuicultura, la transformación, la comercialización y el fomento de intereses colectivos, tales como las medidas dirigidas a proteger la fauna acuática, los puertos pesqueros y el desarrollo de nuevos mercados.
Todo ello para reestructurar y reorientar las actividades económicas que se desarrollan en los puertos de San Vicente de la Barquera, Comillas y Suances, a través de la promoción del turismo ecológico, además de la promoción de la actividad de los pescadores, creando empleos adicionales fuera del sector y pequeñas infraestructuras y servicios relacionados con la pesca y el turismo.
Al mismo tiempo, fomenta la protección del medio ambiente en esos municipios costeros y la regeneración de sus infraestructuras tradicionales como un medio para proteger y mejorar su patrimonio natural y arquitectónico.