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La delegada del Gobierno en Cantabria y el presidente de la Asociación Vital Alsar, Javier Cantera, han presidido el acto.
La delegada del Gobierno en Cantabria, Ainoa Quiñones, ha ensalzado al “gran navegante y pacifista” Vital Alsar, a quien ha considerado un “referente indiscutible, un visionario y un defensor irrefutable de los derechos de todas las personas”, y lo ha hecho al entregar a su familia la condecoración de la Cruz de Oficial de la Orden al Mérito Civil a título póstumo.
Quiñones ha presidido este jueves el acto de entrega de la condecoración por parte de la Delegación del Gobierno de España en Cantabria, coincidiendo con el primer aniversario del fallecimiento de Vital Alsar. En el acto, además de la delegada, ha intervenido el presidente de la Asociación Vital Alsar, Javier Cantera, y ha contado con la asistencia de varios familiares del navegante, que han recogido la condecoración.
La delegada del Gobierno ha destacado que Alsar fue “cántabro ilustre y ciudadano del mundo” y tuvo una “vida repleta de odiseas épicas, de amor incondicional por la mar y de constancia infatigable en demandar la Paz por encima de colores, ideologías, razas, religiones o creencias”, y todo eso le ha convertido en “símbolo de la cultura oceánica universal”.
Esos valores y “su vida al servicio de la sociedad española” es lo que ha reconocido la Delegación del Gobierno de España en Cantabria con la concesión de la condecoración de la Orden del Mérito Civil a título póstumo a Vital Alsar y poner así de relieve, como ha ensalzado Quiñones, “una vida ejemplarizante con la que enseñar a las próximas generaciones que se puede vivir sin odio al diferente, sin discriminación a quien no piensa igual, sin desprecio a quien nos adentra en culturas, idiomas, tradiciones distintas a las nuestras pero tan ricas y legitimas como las que conocemos”.
“Los jóvenes santanderinos, cántabros y españoles tienen en Vital Alsar un buen espejo en el que mirarse para aprender a recorrer el camino de la vida sin prejuzgar, sin condenar lo distinto, sin valorar a las personas por el color de su piel, por el lenguaje con el que se expresan, por su condición sexual o por su religión y cultura”, ha añadido la delegada del Gobierno.
Y ha apuntado que, “en momentos como los actuales en los que vemos cómo crecen los delitos de odio en nuestro país, el ejemplo de Vital Alsar es un grito frente al miedo, es una llamada viva frente a la intolerancia. Es un clamor contra la resignación”. “No pedimos ni pediremos nunca tolerancia, queremos respeto para todas las personas”, ha apostillado.
Antes de hacer entrega de la condecoración a los familiares, acompañados de miembros de la asociación que difunde su legado, Quiñones ha recordado que la “luz” de Vital Alsar se apagó el 15 de septiembre de 2020 “y nos dejó un poco huérfanos de esa vitalidad, fuerza, valentía y humanidad con las que veló por los valores universales que hacen posible la convivencia en paz, pero su ejemplo de vida seguirá para siempre en el seno de nuestra sociedad”.
“Sirva este reconocimiento del Gobierno de España para dar testimonio público del valor de su figura universal y de ese ejemplo de vida que debe permanecer en el ideario colectivo de cántabros y santanderinos para siempre”, ha concluido la delegada.
“PERSONA EXTRAORDINARIA E IMPRESCINDIBLE EN LA HISTORIA”
Posteriormente, Quiñones ha entregado a la viuda y las hijas de Vital Alsar la medalla y el diploma que acreditan la concesión de la condecoración de la Cruz de Oficial de la Orden al Mérito Civil. La viuda del navegante santanderino, Denisse Zuñiga, ha ensalzado que Vital Alsar “amaba su tierra, luchó por la paz y fue un hombre totalmente íntegro en todos los aspectos de su vida”, ha dicho.
En el acto también ha intervenido el presidente de la Asociación Vital Alsar, Javier Cantera, que ha agradecido al Gobierno de España la condecoración a Alsar y especialmente a su máxima representante en Cantabria, Ainoa Quiñones, por “todo el apoyo y este gran reconocimiento a Vital”.
Cantera ha ensalzado que Vital Alsar fue “una persona extraordinaria e imprescindible en la historia, de esas que tiene la capacidad de cumplir sus sueños, inspirando a miles y haciéndoles soñar a lo grande y en azul”.
“El navegante oceánico, cántabro ilustre y ciudadano del mundo, con toda una vida conectada al mar y a la naturaleza, tuvo la constancia infatigable de demandar la paz por encima de colores, ideologías, razas, religiones o creencias”, ha añadido.
“Vital Alsar, por derecho propio, se ha convertido en un símbolo de la cultura oceánica universal. Idealista, soñador y más vital que su propio nombre de los que podemos dar fe todos los que tuvimos el placer de conocerle”, ha señalado el presidente de la asociación que difunde su legado.