36050 visitas
La delegada del Gobierno en Cantabria se ha reunido con representantes de Cruz Roja, Movimiento por la Paz y Nueva Vida, entidades que atienden a los refugiados afganos.
La delegada del Gobierno en Cantabria, Ainoa Quiñones, ha destacado su confianza en que los 41 refugiados afganos derivados a la Comunidad Autónoma en el marco del Programa de Protección Internacional del Gobierno de España “encuentren aquí el hogar donde recuperar la esperanza” tras el “drama humanitario” que han padecido. Por ello, ha pedido a los cántabros y a las cántabras que “hagamos entre todos que se sientan acogidos, respetados y queridos” en nuestra tierra.
Quiñones así lo ha señalado este lunes tras la reunión que ha mantenido con representantes de Cruz Roja, Movimiento por la Paz y Nueva Vida, entidades que atienden en nuestra Comunidad Autónoma a los refugiados afganos, 24 hombres y 17 mujeres, 41 personas de las que 14 son menores.
Al encuentro han asistido la coordinadora de Cruz Roja en Cantabria, Beatriz Aldama, y la responsable del Programa de Refugiados de la entidad, Sandra García. Por parte de Movimiento por la Paz, han participado el coordinador del Programa de Protección Internacional, Pablo Lobo, y la abogada del Programa, Cristina García. Mientras que la Asociación Nueva Vida ha estado representada por su coordinador y gerente, Julio David García Justamante, y la técnica del Programa de Protección Internacional, María Asunción Buil.
La delegada del Gobierno ha manifestado que “nadie puede estar orgulloso ni contento con nada de lo que ha pasado en Afganistán en las últimas semanas” y “no podemos alegrarnos de que las familias que hoy están en Cantabria hayan llegado hasta aquí porque su llegada es una derrota de toda la comunidad internacional”.
“Estoy convencida de que todos ellos querrían seguir viviendo en su país, cerca de sus familias, de sus amistades, de los paisajes con los que nacieron y vieron crecer a sus hijos. Con su gastronomía, su cultura y su idioma”, ha añadido.
No obstante, ha ensalzado que, de lo que sí “podemos alegrarnos”, es de que “España haya liderado la respuesta humanitaria internacional porque eso sí es un motivo de orgullo del Gobierno y del país que somos”.
Así, ha recordado que el Gobierno de España desarrolló “un gran trabajo” para evacuar “a cuántas personas fuese posible”. “En una situación muy complicada, impulsó un dispositivo sin precedentes para sacar de Afganistán a muchísimas personas, casi 1.700 al final, ya que la operación concluyó tras los atentados y el cierre del aeropuerto de Kabul”, ha dicho.
De todas esas personas evacuadas, 41 se encuentran en Cantabria y son atendidas por Cruz Roja, Movimiento por la Paz y Nueva Vida que “están realizando un gran trabajo para ayudarles en su integración, algo que no es fácil ya que no hablan nuestro idioma y tienen una cultura totalmente diferente a la nuestra, con un contraste muy grande en las costumbres”.
Estas entidades han trasladado a Quiñones que “ya se ha completado la escolarización” de los 14 niños y niñas afganos pero “me han contado que están teniendo problemas sobre todo con el idioma”. “Se contratan traductores, pero no hablan el mismo dialecto y es lo que más está complicando avanzar, principalmente en toda la documentación para el asilo y la residencia”.
En cuanto al estado de ánimo de esas personas, ha detallado que desde las organizaciones le han indicado que “hay de todo, pero está siendo una labor difícil porque tiene una cultura y lenguaje totalmente diferentes” pero Cruz Roja, Movimiento por la Paz y Nueva Vidas “trabajan incansablemente para favorecer su integración”.