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Santander – 24.09.2021
“Prevención” sin duda, es la palabra más pronunciada y escuchada estos días en el Palacio de Festivales de Cantabria. En ella hay que poner el foco porque es “la gran asignatura pendiente en sanidad”, aunque bien es cierto que la pandemia, a pesar del problema terrible y el sufrimiento que ha causado, está ayudando a ubicar la prevención en salud en el lugar que le corresponde.
El consejero de Sanidad, Miguel Rodríguez, se ha pronunciado así en el debate final del XXI Congreso Nacional y X Internacional de la Sociedad Española de Medicina Preventiva, Salud Pública e Higiene (SEMPSPH), que hoy toca a su fin, después de tres intensos días en los que más de 450 especialistas en la materia han debatido sobre los retos de la profesión tras el paso del COVID-19 y la actualización y puesta en común de protocolos y temas de práctica diaria.
En su intervención, Rodríguez ha apostado, una vez más, por “escuchar más al paciente, porque nunca se les escucha lo suficiente”. El paciente fue, es y será siempre el centro del sistema sanitario. Todas las comunidades autónomas estamos trabajando en ello, ha afirmado, con escuelas de salud o centrando la estrategia de atención en pacientes crónicos.
Cantabria ha gestionado bien la pandemia
Además, el titular de Sanidad ha insistido en la “buena gestión” de la pandemia en Cantabria, que ha relacionado directamente con el seguimiento escrupuloso del “criterio técnico” para tomar todas las decisiones.
En este sentido, Rodríguez ha destacado que todas las regiones han adoptado medidas similares, “en las que han ido de la mano” y ha citado como ejemplo las decenas de reuniones del Consejo Interterritorial o las varias versiones del documento de actuaciones coordinadas.
Las diferencias, ha añadido, han sido puntuales, porque cada territorio ha aplicado medidas conforme a su situación e idiosincrasia, pero el esfuerzo de coordinación ha sido “enorme”.