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Luisa Real ha visitado hoy las instalaciones del Servicio de Atención Temprana de Santander, ubicado en el Centro de Salud El Alisal
El Servicio Cántabro de Salud (SCS) tiene incluido desde el año 2005 el Servicio de Atención Temprana en su cartera de servicios, lo que convierte a Cantabria en pionera, un referente a nivel nacional y una de las pocas comunidades autónomas que actualmente tiene garantizada la prevención, detección precoz, diagnóstico y atención de los trastornos de desarrollo de los menores desde su nacimiento.
La consejera de Sanidad, Luisa Real, ha visitado hoy las instalaciones del Servicio de Atención Temprana de Santander, ubicado en el Centro de Salud El Alisal, que también se presta en Torrelavega, Laredo y Reinosa.
“La Consejería de Sanidad -ha dicho Real- concibe la Atención Temprana dentro de un abordaje interdisciplinar, orientado a las necesidades del niño con problemas del desarrollo o con riesgo de padecerlos, y de su familia, dentro de un marco de gratuidad, universalidad y accesibilidad”.
Para la consejera, este servicio supone “un gran salto cualitativo” en la prevención y detección, de forma anticipada, de cualquier alteración del desarrollo (motriz, de lenguaje, sensorial o conductual) o riesgo de padecerla en menores desde su nacimiento y hasta los 6 años, mediante una intervención integral, “lo más precoz posible” y en aquellos casos que lo precisen, para conseguir que todos los menores alcancen el máximo nivel de desarrollo personal y de integración social.
Durante la visita, la consejera ha estado acompañada de la directora general de Salud Pública, Virginia Ruiz, y la coordinadora de Atención Temprana de Cantabria, Adelaida Echevarría.
Atención inmediata, sin demoras
En la actualidad, las distintas unidades de Atención Temprana realizan seguimiento a más de un millar de menores, la mitad de ellos con edades comprendidas entre los 0 y los 3 años.
Los lactantes y el grupo de 0 a 3 años son valorados de forma inmediata y, si lo precisan, se realiza una intervención integral para potenciar las capacidades del menor en habilidades perceptivas, motrices, cognitivas, lingüísticas y sociales, que previenen o minimizan la aparición de una deficiencia o discapacidad posterior.
A partir de los 3 años, la valoración inicial se realiza en menos de 7 días y, si es preciso iniciar tratamiento y los menores ya están escolarizados, se integra la prestación del servicio en el propio centro educativo, haciendo partícipes del proceso a los servicios educativos, que aplican los recursos necesarios para estimular y potenciar el desarrollo de los pequeños, intentando alterar lo menos posible sus rutinas escolares.
Las cuatro unidades de Atención Temprana de Cantabria funcionan en horario ininterrumpido de 08:00 a 20:30 horas. Están integrados por un equipo que cuenta con fisioterapeutas, técnicos en desarrollo infantil, bien psicólogo o psicopedagogo, y logopedas y trabajan en estrecha colaboración con todos los profesionales de atención primaria, fundamentalmente con pediatras, médicos de familia, personal de enfermería, matronas, trabajadores sociales y fisioterapeutas.
