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- El Consistorio podrá destinar estos ahorros a financiar nuevas inversiones sostenibles y a seguir rebajando deuda
- En el último ejercicio se volvió a reducir el endeudamiento hasta situarse en el 48,04%, en mínimos históricos y muy por debajo del límite del 110%
El Ayuntamiento de Santander registró en 2018 un superávit de algo más de 28,7 millones de euros, unos ahorros que se podrán destinar este año a financiar nuevas inversiones sostenibles y a seguir rebajando deuda.
Así lo ha señalado la concejala de Economía y Hacienda, Ana González Pescador, quien ha agregado que también las sociedades municipales arrojaron balances positivos, sumando el conjunto de la administración municipal un superávit global de unos 30 millones de euros. 
Son algunos de los datos que se extraen de la liquidación presupuestaria de 2018, de la que se dará cuenta en el próximo pleno municipal, y que refleja también una nueva reducción de la deuda y el cumplimiento de los objetivos de estabilidad presupuestaria y de la regla de gasto.
En palabras de González Pescador, “la liquidación de 2018 pone de manifiesto una gestión presupuestaria prudente y responsable, que garantiza una adecuada prestación de los servicios municipales, manteniendo unas cuentas saneadas, equilibradas y con capacidad financiera para hacer frente a las obligaciones y para afrontar nuevas inversiones”.
De acuerdo con los datos de la liquidación, el pasado año los ingresos municipales ascendieron a 196 millones de euros, lo que representa un grado de ejecución del 99,14% de lo previsto y ratifica el “cálculo realista y ajustado” de ingresos realizado al elaborar el presupuesto de 2018.
La buena evolución de los ingresos evidencia también un mayor dinamismo económico en general, y en particular en el sector de la construcción, que se tradujo en un aumento de la recaudación por conceptos como el Impuesto de Actividades Económicas, el de Construcciones o las licencias de obra, ha apuntado.
En cuanto a los gastos, ascendieron a 158,8 millones, con un grado de ejecución superior al 80% con respecto a las previsiones iniciales, consiguiéndose en este caso importantes ahorros en capítulos como los gastos financieros (por los bajos tipos de interés).
También se constataron ahorros significativos en el capítulo de inversiones en el que, además, parte de los compromisos computarán en 2019, al haberse alargado la tramitación administrativa y no quedar reflejados en las cuentas de 2018.
A cierre del ejercicio las cuentas municipales presentaban un remanente de tesorería de 48,7 millones de euros.
En cuanto al nivel de endeudamiento, la liquidación presupuestaria de 2018 muestra una nueva reducción de la deuda bancaria, que se situó en 77,1 millones de euros, lo que representa un índice del 48,04%, “en mínimos históricos y muy por debajo del límite legal del 110%”.
Comisión de Hacienda
Por otro lado, la concejala de Economía ha informado sobre los asuntos que se someterán a la próxima Comisión de Hacienda, en concreto, un expediente para el pago de facturas de diferentes servicios municipales por importe cercano a los 3,5 millones de euros.
La mayor parte de ese importe (algo más de 2 millones) corresponde al pago de las últimas mensualidades facturadas del servicio de parques y jardines, y el resto se destina al pago de suministro eléctrico para alumbrado, colegios y otras dependencias, al mantenimiento de infraestructuras viarias y de telecomunicaciones o al servicio de ayuda a domicilio, entre otros.
Según ha explicado González Pescador, con este expediente el Ayuntamiento garantiza el pago a los proveedores de distintos servicios prestados a los ciudadanos que no han podido seguir la tramitación ordinaria, bien por tratarse de contratos pendientes de nueva adjudicación o por otras incidencias en su tramitación.
En todos los casos se tratan de gastos que cuentan con su correspondiente consignación presupuestaria y con los informes de los respectivos servicios explicando los motivos para su inclusión en este expediente.
