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- Su Majestad la Reina visitó las reformas realizadas en el Real Monasterio de la Encarnación, que ha acondicionado sus instalaciones para personas con discapacidad física y visual, gracias al Real Patronato sobre Discapacidad, el Consejo de Administración del Patrimonio Nacional y la Fundación ACS.
Doña Letizia, tras su llegada al Real Monasterio de la Encarnación, fue informada sobre las actuaciones de accesibilidad llevadas a cabo y visitó la Nave de la Iglesia, la Antesacristía y la Sala Madre Mariana, también mantuvo un breve encuentro con la comunidad religiosa encabezada por la priora del Real Monasterio de la Encarnación, Visitación Arroquí, y los capellanes, Joaquín Martín y Juan Carlos Ramos, finalizando la visita con un recorrido por el Coro, el Claustro bajo, la Sala de pinturas, la Portería Reglar y el Zaguán.
En esta ocasión, Su Majestad la Reina estuvo acompañada por la vicepresidenta del Gobierno y ministra de la Presidencia, Relaciones con las Cortes e Igualdad, Carmen Calvo; el presidente del Consejo de Administración del Patrimonio Nacional, Alfredo Pérez de Armiñán; autoridades e integrantes de la comunidad religiosa del Real Monasterio de la Encarnación.
Con estas obras de accesibilidad se pretende eliminar las barreras que impidan la “accesibilidad universal”, así como la instalación de recursos y herramientas de acceso a la información y la comunicación para personas con discapacidad visual (maquetas tiflológicas) o auditiva (bucle magnético) en éstos y otros Reales Sitios.
Además, todo ello debe ser compatible con la “preservación de la naturaleza del bien patrimonial sobre el que se actúa”, como han señalado las instituciones. Así, el Real Patronato sobre Discapacidad participa y asesora en la configuración y desarrollo de las actuaciones objeto de la colaboración y ofrece soporte documental y bibliográfico que pueda resultar necesario para la realización de las actividades.
Se adaptarán los accesos a las instalaciones, se realizarán servicios abiertos al público y centros de investigación eliminando barreras arquitectónicas y obstáculos que limiten, el ingreso y desplazamiento en el Real Monasterio de la Encarnación o el acceso a los instrumentos de información de las personas con algún impedimento físico o sensorial.
