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El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares ha intervenido en la clausura del curso La conferencia sobre el futuro de Europa (COFOE) en el que ha señalado la importancia de la cohesión de los estados de la Unión, afirmando que “ningún estado europeo puede afrontar las crisis por sí mismo”.
La clausura ha estado presidida por María Luz Morán, rectora de la UIMP, y ha contado con la participación de Francisco Aldecoa, presidente del Consejo Federal Español del Movimiento Europeo, Eva Maydell, presidenta del Movimiento Europeo Internacional y Paula Fernández, consejera de Presidencia, Interior, Justicia y Acción Exterior del Gobierno de Cantabria.
Albares ha comenzado su intervención elogiando el formato de la conferencia por su carácter “abierto, plural y con distintas voces”. Sobre el estado actual de Europa, Albares ha indicado que “paradójicamente, estamos en un momento con expectativas mucho más positivas que hace unos meses”.
En este sentido, ha recordado cómo se encontraba la Unión Europea antes del estallido de la pandemia, con problemas como la salida del Reino Unido, y ha destacado que cuando llegó el covid-19 “Europa estuvo a la altura del reto de nuestra generación”.
Albares ha recordado que en ese periodo Europa “da un salto inmenso, con una emisión conjunta de deuda solo comparable a la creación del euro”. Por ello, el ministro ha remarcado que “la gestión de la pandemia, de nuestra moneda, de la seguridad de nuestros ciudadanos, la lucha contra la inmigración irregular y el cambio climático” son desafíos que “solo se pueden afrontar juntamente con todos los socios de la Unión Europea”.
Además, el ministro de Exteriores ha defendido la necesidad de que los Veintisiete refuercen su política exterior y de defensa y sus capacidades estratégicas tras lo sucedido en Afganistán. Esta crisis”ha puesto encima de la mesa nuestra seguridad estratégica” y “nos ha demostrado que la UE necesita más capacidades estratégicas”, ha añadido,
En referencia a la Conferencia sobre el Futuro de Europa, ha manifestado que los europeos “tenemos que pensar qué somos, qué queremos ser”. Para ello ha marcado dos pasos, primero “acordando los objetivos de futuro” y en segundo “analizando las reformas institucionales para adaptar Europa a lo que queremos que sea”.
Es por eso por lo que ha puesto en valor la participación de los ciudadanos a través de una plataforma creada para realizar propuestas que puedan incorporarse al debate, señalando que “el papel de la sociedad civil es esencial”. Sobre esto, ha recitado los números de participación actuales en el ejercicio, con “25.000 personas registradas en casi 2.000 eventos, con 7.000 ideas sobre la mesa y unas 38.000 adhesiones”.
Albares ha cerrado su declaración hablando de la transformación de Europa a nivel económico y social. El ministro ha destacado los dos frentes por los que pasa la transformación, “la lucha contra el cambio climático y la transformación digital, el pacto verde”, aprovechando para pedir a la Conferencia que le “ayuden a reflexionar sobre estas prioridades”.
