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La nueva consulta de Uroginecología de Valdecilla ha atendido a cerca de cien mujeres en sus tres primeros meses de funcionamiento
La recién creada consulta supone una iniciativa innovadora a nivel nacional, que ha despertado ya el interés de profesionales de otros centros de referencia
Cerca de 100 mujeres se han beneficiado ya de la reciente creación de la consulta de Uroginecología de Valdecilla, una nueva herramienta para mejorar la atención de las pacientes en la que se combinan los conocimientos especializados de los servicios de Urología y Ginecología del Hospital, con el objetivo de ofrecer una atención global a pacientes que presentan casos complejos de patología compartida, como incontinencias graves, infecciones, prolapsos o secuelas postquirúrgicas.
Se trata de una iniciativa innovadora, que, aunque está empezando a ser relativamente común a nivel internacional, es pionera en España, donde la colaboración entre estos dos servicios especializados no está establecida estructuralmente. Por ello ya ha suscitado el interés de hospitales de otros puntos de España, tal y como explican los responsables de esta nueva consulta, el urólogo Sergio Zubillaga y la ginecóloga Ana Belén Muñoz.
Así, la consulta de Uroginecología de Valdecilla cita a pacientes derivadas de las unidades de Urología Funcional y Suelo Pélvico, estudia sus casos a la vez y de forma colaborativa y, como consecuencia, las exploraciones, las pruebas e incluso las cirugías se minimizan. “Hasta ahora se llevaba de forma independiente, por especialidad, y muchas veces con asistencia duplicada. Consideramos que hacerlo de manera conjunta iba a proporcionarles mejor asistencia a las pacientes y reducir el número de veces que acuden el Hospital, además de conseguir una sola cirugía para abordar el problema y sus derivadas en ambas especialidades”, explica Zubillaga, convencido de que esta consulta compartida por ambos servicios “es una semilla que va a ir creciendo”.
Por el momento, tal y como explican sus responsables, la consulta funciona de modo quincenal, y en ella pueden realizarse pruebas específicas de ambas especialidades, como ecografías de suelo pélvico (Ginecología), citoscopias y urodinamias (Urología), por ejemplo. Además, una vez al mes disponen de un quirófano para realizar cirugías de forma conjunta. Así, se han ejecutado por primera vez en el Hospital técnicas quirúrgicas como la colposacropexia, una operación en mujeres con prolapso urogenital para recuperar la anatomía original de la región y sus funciones.
Además de beneficiar a las pacientes, este trabajo colaborativo con doble enfoque enriquece el desarrollo profesional de los especialistas. A los ginecólogos sobre Urología, tratando temas exclusivamente relacionados con la vejiga, y a los urólogos sobre ciertas prácticas ginecológicas como la ecografía.
“Es una gran satisfacción poder hacer una consulta así, porque los ginecólogos aprendemos de Urología y ellos aprenden de nosotros otras cosas”, afirma Muñoz. “Para nosotros es gratificante trabajar con otros compañeros. Nos hace crecer, nos hace ser mejores, nos enseña todos los días cosas nuevas”, añade Zubillaga.
Por parte de las pacientes, aseguran que están recibiendo muy buenas críticas al dar una respuesta mucho más rápida a problemas “que les incomodan mucho”. “Antes iban primero al urólogo, que les hablaba de unas soluciones y nos las remitía para que nosotros solucionásemos otras cosas. Ahora en un mismo día damos una respuesta más integral y la paciente se va con la sensación de que se la ha tratado de todo en el mismo momento, sin dejar nada pendiente al otro especialista”.