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Santander – 11.10.2019
La consejera de Educación, Formación Profesional y Turismo, Marina Lombó, se ha comprometido a hacer del Consejo Escolar un órgano “central” en el sistema educativo cántabro, ya que constituye, sostiene, un foro “muy oportuno” para la “reflexión sosegada y el debate sereno” sobre el futuro de la Educación en Cantabria.
La titular de Educación se ha expresado en estos términos tras participar en la primera reunión del Consejo Escolar en este curso 2019-2020, la primera, también, presidida por Eduardo Ortiz, celebrada en la tarde de ayer en la sede del órgano, en el Colegio Simón Cabarga.
La consejera ha subrayado que el Consejo Escolar, como máximo órgano de consulta en materia de enseñanzas no universitarias dentro de Cantabria, tendrá un “papel protagonista” en la reflexión sobre todas aquellas cuestiones que afecten al sistema educativo de Cantabria, aportando una perspectiva “plural”, en la que se “escuche la voz de todos los actores implicados en la comunidad educativa”. Por este motivo, ha apostado por potenciar su papel de “representación, debate y encuentro de la totalidad de los agentes de la comunidad educativa”.
Además, ha destacado como elemento decisivo de trabajo el Pacto por la Educación, alcanzado la pasada legislatura, que concitó el consenso de la comunidad educativa de Cantabria y que contiene 120 medidas sobre el modelo educativo que se quiere desarrollar, a la vez que ha destacado la importancia de la participación como uno de los “agentes de mejora del sistema educativo”. “Si el Consejo será un elemento central, el Pacto por Educación ha de ser nuestra guía”, ha afirmado Lombó.
Funciones del Consejo Escolar
El Consejo Escolar cada año presenta un informe sobre el estado y situación del sistema educativo no universitario en Cantabria y ejerce funciones de asesoramiento y consulta ante la Consejería de Educación, Formación Profesional y Turismo.
Es uno de los órganos colegiados de gobierno presente en todos los centros educativos que, junto con otros órganos de coordinación, hacen posible la participación, autonomía y gobierno de los centros.
Constituye una apuesta fundamental por la implicación de toda la comunidad educativa en la toma de decisiones tan importantes como son la selección del director, la puesta en marcha de actividades extraescolares, aprobar y evaluar la concreción del currículo y todos los aspectos educativos de los proyectos y de la programación general anual, así como para proponer medidas e iniciativas que favorezcan la convivencia en el centro.
El pleno del Consejo Escolar está constituido por el profesorado de los niveles educativos no universitarios de centros públicos y concertados; representantes de padres y madres de alumnos; titulares de centros docentes privados; representantes de la Federación de Municipios de Cantabria; altos cargos de la Consejería de Educación; una representación de la Universidad de Cantabria; entidades asociativas de empresarios; sindicatos, y por último, representantes del personal de Administración y Servicios de centros docentes y de las federaciones, asociaciones y confederaciones de sindicatos de alumnos.
Fuente: www.cantabria.es