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La consejera ha estado presente en el CECOP durante un simulacro de riesgo químico desarrollado con una industria de Santander.
La consejera de Presidencia, Interior, Justicia y Acción Exterior, Paula Fernández Viaña, ha reiterado esta mañana su puesta en valor del trabajo realizado por el Gobierno en materia de planificación y prevención en emergencias. En este sentido, ha recordado que Cantabria es una de las pocas Comunidades Autónomas con la Estrategia Regional de Protección Civil finalizada, marco de actuación que se aprobó en 2019 con vigencia hasta 2024.
La consejera ha realizado estas declaraciones durante un simulacro de riesgo químico llevado a cabo hoy con una industria de Santander y el Puerto de la localidad. El Gobierno de Cantabria ha realizado en los últimos dos años 17 simulacros de estas características para entrenar distintos tipos de riesgos (inundaciones, rescates, riesgo químico), “acciones fundamentales”, ha dicho Fernández Viaña, para dar “la mejor de las respuesta en emergencias reales”.
En este ejercicio, coordinado por la Dirección General de Interior del Ejecutivo, se ha simulado la activación del Plan de Emergencia Interior de la empresa, del Plan de Emergencia Exterior del Gobierno, y del Plan Marítimo Portuario en fase de alerta. En virtud de estas normativas se han desplegado los órganos de dirección y coordinación del Centro de Coordinación Operativa (CECOP), tres Puesto de Mando Avanzado (PMA) y los distintos Grupos de Acción implicados.
La titular del área de emergencias del Gobierno ha visitado el CECOP, ubicado en el 112, donde ha podido comprobar la labor realizada tanto por los cuerpos intervinientes como por el personal de la industria y del Puerto de Santander, afectado por el incidente simulado. En este marco, ha hecho hincapié en “la necesidad de anticiparse a los riesgos que se puedan dar en la Comunidad Autónoma para minimizar sus consecuencias”, línea en la que ayer se probó el sistema de mensajes masivos a la población ES-ALERT.
Para Fernández Viaña, “las emergencias hay que comenzar a atajarlas antes de que se produzcan con marcos normativos y protocolos que fijen las líneas de acción a seguir, y el desarrollo de ejercicios que ayuden a poner en práctica las pautas prestablecidas”. Son simulacros, como el desarrollado hoy, los que “nos permiten entrenar y analizar la capacidad de respuesta y la coordinación de los efectivos de todos los niveles institucionales, para ofrecer intervenciones más eficientes en casos reales”.
Con el simulacro realizado esta mañana se ha trabajado la ejercitación de los grupos de intervención con equipos de riesgo químico (NRBQ), se han probado las comunicaciones REMERCANT con emisoras en atmósferas explosivas (ATEX), se ha entrenado la integración de los enlaces en el Puesto de Mando Avanzado, y se ha puesto en práctica el escalado entre el Plan de Emergencia Interior del Puerto y el Plan de Emergencia Exterior de la empresa.
En su desarrollo han participado casi 60 efectivos con 25 vehículos de las direcciones generales de Interior e Industria del Gobierno de Cantabria; del 112, Guardia Civil, 061, Cruz Roja, Autoridad Portuaria de Santander, Policía Portuaria, Delegación de Gobierno, Ayuntamiento de Santander, Bomberos de Santander, Bomberos de Torrelavega y la empresa objeto del simulacro. Además, han acudido a ver el ejercicio alumnos del Ciclo Formativo de Grado Superior de Prevención de Riesgos Profesionales de Peñacastillo.
Este tipo de simulacros, en los que se ponen a prueba los Planes de Emergencia Exterior de empresas con riesgo químico, se realizan periódicamente, por parte de la Dirección General de Interior del Gobierno, en las nueve industrias afectadas por la directiva SEVESO en Cantabria. En este sentido, la consejera ha puntualizado que “son instrumentos necesarios para prevenir y reducir, en su caso, las consecuencias de posibles accidentes en entornos de riesgo”.
La respuesta otorgada ante las supuestas situaciones de emergencia es evaluada para mejorar las medidas de protección, analizar la necesidad de medios humanos y materiales, y poner a prueba los esquemas de coordinación de los efectivos de los tres niveles institucionales (local, autonómico y estatal) y las propias industrias.