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Este pasado miércoles, el tenor santanderino Juan Carlos Gago estuvo en el colegio Ramón Pelayo de Santander, para tener un encuentro con los niños de primaria. Previamente el tenor tuvo la oportunidad de visitar el centro acompañado por su director, Diego Gutiérrez.
Juan Carlos exalumno del centro, vivió con emoción el recorrido por “EL GRUPO”, que así era como se conocía al colegio popularmente, emoción que creció de manera especial, cuando el recorrido llegó al aula más especial para él, llena de recuerdos entrañables…
Pero si la emoción y los recuerdos habían sido grandes, la nostalgia y la alegría se sumo a la memoria de nuestro cantante, cuando abrió la puerta que daba paso al Salón de actos del colegio. Allí Juan Carlos había interpretado obras de teatro y, lo más relevante, había cantado por primera vez cara al público. ¡Aquí fue donde canté por primera vez! exclamo el tenor al subir al escenario. Aquí comencé a soñar con cantar algún día, ¡tenía 12 años! añadió
Cuando los niños llenaron el salón de actos, Juan Carlos les contó que la primera canción que cantó allí fue “Granada” del compositor Agustín Lara. Y que, desde entonces, la cantó muchas veces en los tres últimos años que estuvo en el colegio, ya que así se lo pedían constantemente, tanto sus compañeros como los propios maestros.
El encuentro con los niños fue estupendo, ellos se comportaron muy bien, realizando muchas preguntas al tenor, de su vida, actuaciones, sus óperas y canciones favoritas, como se cuidaba…e incluso, si había compuesto y cantado alguna vez una canción para una chica. A lo que el exalumno respondió que sí, pero que no había servido nada, ironizo, entre las sonrisas de los niños.
Durante el encuentro se proyecto el “Himno a Liébana” compuesto e interpretado por el tenor, que significado un rotundo éxito desde su presentación el 20 de octubre de 2018 en Potes.
Pero quedaba todavía una sorpresa muy especial. Al finalizar el acto se le hizo entrega a Juan Carlos de un libro de una edición escolar de él “El Quijote” Edición que tuvo en sus manos (como el resto de sus compañeros) cuando tenía 10 años, que le ayudo a leer mejor, y conocer la obra maestra de Cervantes.
. – Este colegio me ayudo a hacerme mejor persona, me formo y me ayudo en a encarar una etapa de la vida difícil y fundamental para el futuro”
Y si esto no fuera poco, encima de este escenario, desde el cual os hablo, comenzó, sin yo saberlo, a fraguarse la que iba a ser mi profesión y mi nombre artístico: Juan Carlos Gago tenor. ¡Gracias a todos, al Grupo Ramón Pelayo, gracias de corazón!
