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El vicepresidente del Gobierno de Cantabria, Pablo Zuloaga; la alcaldesa de Laredo, Charo Losa; y distintos miembros de la corporación municipal pejina han participado del evento. El aforo de la parroquia se ha adaptado al protocolo sanitario para evitar los riesgos derivados del COVID-19.Durante la presentación, el vicepresidente de Cantabria, Pablo Zuloaga, ha anunciado la puesta en marcha del Plan Director de la Iglesia de Santa María de la Asunción de Laredo cuando culminen las obras de renovación de la cubierta, que se ejecutan en estos momentos con un presupuesto de 300.000 euros, cofinanciados por la Consejería de Cultura, el Ayuntamiento y el Obispado de Santander.
La alcaldesa ha felicitado a los autores y ha destacado que esta publicación contribuirá a introducir al lector en el conocimiento de un templo que es “el faro guía” de Laredo desde su construcción en el siglo XIII y a descubrir “secretos” que se escapan al alcance de la vista. Fernando Baylet e Imanol López han agradecido el respaldo de las instituciones a una obra creada para el pueblo de Laredo y para todos los amantes del patrimonio de Cantabria.
El libro, editado en colaboración con el Ayuntamiento de Laredo, plasma de una forma amena y precisa el resultado de la vinculación sentimental e intelectual entre la que muchos consideran catedral laredana y Fernando Baylet, quien ha sido su guía oficial durante las últimas décadas. Esa convivencia cotidiana entre las piedras, el alma del templo y uno de sus más entusiastas valedores se ha traducido en multitud de hallazgos, que ahora se ponen a disposición del gran público.
Los capítulos, ordenados según las horas canónicas que durante siglos marcaron el ritmo de pueblos y ciudades, son una oportunidad para descubrir desde una novedosa perspectiva multitud de datos históricos, legendarios o de gran arraigo popular vinculados a la iglesia laredana.
La primitiva advocación a la Virgen de Belén; las sucesivas ampliaciones motivadas, entre otras causas, por la decisiva participación de marinos laredanos en la Reconquista de Sevilla; el reparto de las distintas capillas; o la interpretación de algunos de los numerosos capiteles distribuidos en las columnas de este imponente edificio, son sólo algunos de los hitos en los que el lector podrá detenerse para saciar su curiosidad.
Como muestra de su utilidad práctica, los contenidos se han concebido de forma estanca, de tal forma que se presta a una consulta rápida sobre un aspecto en particular, sin necesidad de seguir un orden lineal en la exposición dispuesta por los autores. Las ilustraciones a plumilla de Imanol López Garín permiten sintetizar en sus trazos la esencia de figuras, elementos arquitectónicos o vidrieras, que en su conjunto completan un tesoro único alojado en la parte más elevada de la puebla original de la villa pejina.
Con este trabajo, ambos autores dan continuidad a una colaboración cultural que tuvo su arranque con la publicación, años atrás, de la obra “Laredo, Breve Guía de Patrimonio” en la que se centraron en resaltar algunos de los edificios más significativos de la trama urbana de la villa pejina.
